
Las villas
Alfonso VIII en el siglo XII-XIII confirma el poder real en la región concediendo fueros a las 4 villas reavivando así la repoblación y el desarrollo de las actividades marineras: Castro Urdiales en 1163, y Laredo en 1200, Santander en 1187 y San Vicente de la Barquera en 1210.
Castro Urdiales Laredo San Vicente de la Barquera Santander
Santander que estaba formada por dos nucleos entre los cuales eran frecuentes las luchas, se convierte en uno sólo a finales del siglo XIII presidido por el abad de la colegiata. En esta época Fernando III empieza la conquista del reino y ciudad de Sevilla enfrentándose a los musulmanes con una flota de los puertos norteños que entra en la capital hispalense a través del Guadalquivir; a la entrada de Sevilla, encuentran el paso cerrado por barcas encadenadas, pero los marinos montañeses rompen las cadenas y toman la ciudad en 1248, es por este motivo que en el escudo de Santander figura la "Torre del Oro". Las naves tomaron parte en los ataques a Tarifa y Málaga, siendo parte importante bajo el reinado de Alfonso X en la toma de Cartagena.
La Hermandad de las 4 villas se había ligado con la de las Marismas que reunía a los puertos de Vizcaya y Guipuzcoa en 1296 formando la "Hermandad de la Marina de Castilla con Vitoria", cuyos objetivos eran la defensa común, el desarrollo del comercio y la prevención de la piratería entre otros. Esta flota junto a las flamencas atacaron Inglaterra en 1350 y 20 años después los norteños participaban en la guerra con Portugal.
Debido a las bodas de los hijos de Pedro I el Cruel con los hijos de Eduardo III de Inglaterra, reclamó éste último la corona de Castilla para uno de ellos, pero Enrique II se niega y envía 12 galeras de la Hermandad para tomar La Rochela en Francia haciendo lo propio el inglés. El combate duró 2 días tras los cuales sale victoriosa la Hermandad haciendo prisionero al conde de Premboke y 60 caballeros más.